jueves, 11 de julio de 2013

El dinero


El dinero es el objeto que utilizamos para comprar bienes y servicios a otras personas. Para que un objeto pueda ser considerado dinero debe cumplir, cuando menos tres funciones:


  1. Ser medio de cambio: Es decir un artículo que los compradores intercambien a los vendedores por bienes o servicios.
  1. Ser unidad de cuenta: Esta característica permite a los individuos valuar los precios de las mercancías que poseen, o de los servicios que prestan, y de este modo saben por qué cantidad de dinero pueden intercambiarlos.
  1. Ser depósito de valor: El dinero puede ahorrarse, es decir evitar gastarlo en el presente, de modo que es capaz de transferir poder adquisitivo al futuro.


Existen distintas mercancías que pueden fungir como dinero. Pero cada una tiene un grado distinto de liquidez, lo que significa, la facilidad con que puede ser intercambiado. El objeto más líquido, o sea, el más intercambiable en una economía, es la moneda de cada país.

¿Sabías que?:
A lo largo de la historia diversos objetos han sido usados como dinero. Se han empleado cigarrillos, pieles, cacao, oro molido, pero probablemente entre los objetos más extraños se encuentran las monedas de piedra de 3 metros de diámetro en la isla de Yap. (Pulsa aquí si quieres saber más).

martes, 8 de enero de 2013

La inversión


El ahorro es muy importante para reunir recursos, para emplear en el futuro, y así cumplir nuestras metas. Pero también es importante saber invertir, pues de esta forma el dinero que no empleamos podrá generar intereses y ayudarnos así a alcanzar nuestros sueños más rápido.
Tal como abordamos, en una entrada anterior, la tasa de interés es inversamente proporcional al riesgo de la inversión. Por tal motivo es aconsejable dividir nuestros ahorros en diversos fondos, de acuerdo al alcance de nuestras metas.

Metas de corto plazo: Debido a que son metas de corto plazo y que generalmente no implican tanto dinero, lo más aconsejable es invertir nuestro ahorro en fondos de inversión  de alto riesgo, pero de atractivos rendimientos. La mayoría de los bancos cuentan con ellos y también existen casas de inversión especializadas. En algunas instituciones pueden abrirse desde mil pesos. Su comportamiento depende del mercado. Por ejemplo, si uno ahorraba para las vacaciones y el mercado se comporta bien uno podrá mejorar el destino de las vacaciones, de lo contrario, bueno uno tendrá que conformarse con unas vacaciones más austeras, pues en estos fondos pueden existir pérdidas.

Metas de mediano plazo. Debido a que se requiere de más tiempo, para ahorrar para cumplir estas metas, y que se trata de más dinero, lo mejor es recurrir a portafolios más conservadores dentro de los fondos de inversión, o adquirir pagares bancarios y contratos a plazo. 

Metas a largo plazo. Lo mejor para este tipo de metas son los fondos más seguros. Si es para el retiro conviene invertir en un afore pues brinda mejores intereses. Si no, los cetes del gobierno son un instrumento muy confiable y con rendimientos muy atractivos.

Consejo práctico:
En la página de la condusef existen simuladores que nos permiten calcular el monto que debemos ahorrar y el tipo de fondo que más nos conviene para cumplir nuestras metas. Da clic en esta liga (Condusef) y explora las posibilidades a tu alcance.

lunes, 7 de enero de 2013

El ahorro


El ahorro consiste en recursos, que nos abstenemos de disponer hoy, para almacenarlos para el futuro. Es más recomendable ahorrar a una tasa constante, de esta forma podremos acumular poco a poco cifras considerables, que hacer grandes sacrificios en el consumo del presente para acumular una gran cifra. Es recomendable cuando menos ahorrar 10 pesos por cada 100 que percibamos.
Tener metas ayuda para ahorrar. No es lo mismo ahorrar de forma abstracta que hacerlo con un objetivo. Las metas pueden ser de corto, mediano y largo plazo. Aquí ponemos algunos ejemplos de los tipos de metas que podemos tener.
  • Corto plazo: Las vacaciones del próximo año, adquirir un bien muy deseado como unos tenis o un dispositivo electrónico, organizar una fiesta, dar un buen regalo. En general se trata de metas cuyo costo sea inferior a unos diez mil pesos. De tal modo que si ahorra cuando menos mil pesos al mes, podrá cubrirlas al cabo de un año.
  • Mediano plazo: Se trata de metas algo más ambiciosas, que puedan ser cubiertas en un plazo inferior a 5 años. Dentro de estas metas se pueden contar, comprar un automóvil, obtener un título universitario, pagarse algún posgrado, maestría o diplomado, realizar un viaje largo, prepararse para casarse o para la llegada de un bebé o reunir un fondo de reserva para contingencias. En general estas metas van de 50 mil a 100 mil pesos. Si usted es capaz de ahorrar mil  quinientos pesos mensuales durante 5 años, podrá disponer de 90 mil pesos al finalizar el periodo.
  • Metas a largo plazo: Se tratan de metas ambiciosas y por lo general costosas. Para conseguirlas, por lo general es necesario ahorrar por periodos mayores a 20 años. Dentro de esta categoría se encuentran, entre otros,  la adquisición de una vivienda, de un automóvil de lujo, la apertura de un nuevo negocio, o simplemente el retiro. Si usted es capaz de ahorrar dos mil pesos de forma constante durante 20 años al finalizar contará con 480 mil pesos.


Consejo práctico.
Si usted puede ahorrar cuatro mil quinientos pesos al mes le será suficiente para cumplir la mayoría de las metas que se proponga. No todos tenemos los mismos ingresos y la misma capacidad de ahorro, pero si usted revisa sus gastos, y corta un poco por aquí y por haya, se sorprenderá. Lo importante es estar motivados y tener muy presentes las metas, de esa forma ahorrar no será tan difícil.